Cuidado con la mano amiga

No sé si estoy paranóico porque hace nada he visto un documental llamado Zeitgeist donde toda la cultura y religión que estaba asentada en mi cabeza sufrió un terremoto 8 en la escala richter. Pero el caso es que me preocupa mucho el tema de la pornografía infantil. Es una cosa que merecería la pena de muerte (incluso para los que como yo estamos en contra), debido a una brutalidad que escapa a mi juicio.
Todo lo necesario para dar caza y captura a estos desechos humanos no es suficiente y por ello, a la policía, hay que darle cuantas más libertades mejor. Pero bien, leo que el FBI utiliza ahora PS3 para desencriptar códigos y cazar a pedófilos. Gracias a ello han conseguido llegar a la locura de 4 millones de contraseñas por segundo. Un gran avance para la caza.
Pero estamos ante lo de siempre, la tesis que nos presentaba Orwell, el personaje de Alan Moore llamado Líder o el mismo gobierno de Bush y Guantánamo. Hasta qué punto nos podemos fiar de que todos estos avances de la caza contra el crímen no se usarán para controlar nuestras transacciones, nuestro sueldo base, nuestras conversaciones, nuestras relaciones, nuestra opinión... porque viendo como está el patio (por ejemplo...) con el PP y sabiendo que la política no es conocida por su honestidad y savoir faire no me fiaría ni un pelo de que el poder tenga estas armas.
Necesitamos con más urgencia que nunca un poder racional, que parta de los principios éticos y filosóficos de grandes pensadores de nuestro tiempo (que no son pocos) y que forme parte del estado.  Que tenga fuerza contra el poder legislativo y judicial y nos permita a la vez, gracias a la tecnología y avances, a ser más humanos. No más esclavos.

¿piratas?

De acuerdo, llamadnos piratas, llamadnos ladrones, llamadnos usurpadores... pero si la plebe del siglo XIV hubiera podido asistir a los conciertos de cámara a través de unos conductos de ventilación, ¿acaso no habrían intentado ver el arte al que sólo unos pocos podían acceder?
El arte, como todo aquello que nos hace reflexionar o encontrarnos a nosotros mismos debería ser gratis. ¿Acaso no es un bien para la humanidad? los buenos grupos siguen llenando estadios con gente dispuesta a pagar lo que cueste una entrada. Porque la gente que es buena, podrá seguir comiendo. Y comiendo bien. El mercado ha cambiado. Las personas hemos cambiado. Las reglas del juego son otras y no vale llorarle a mamá. Ahora si sólo eres un producto de MkTV puedes acabar sin carrera. ¿Por qué gente como Sting o U2 están tan podridamente adinerados? Por qué las reglas de antes ya les iban bien. Pero ahora ya no. En serio, no vale decir: puta piratería, por su culpa en vez de ingresar 2.000.000 de dólares sólo ingresaremos uno. Aquí jugamos todos, y lo hacemos sin falsos fueras de juego ni expulsiones inventadas.

Hemos conseguido que el mundo no sólo se mueva por productores, críticos y distribuidores.

El mundo, poco a poco se mueve por nosotros. Los que estamos al otro lado.

Menos Mal que Tyler Durden llegó antes que Facebook y Twitter...

- Pero Sr Durden, podríamos hacer todo esto con las redes sociales y tendría una repercusión mucho mayor que derribando los edificios del centro Financiero de la ciudad... - dijo uno de los integrantes del proyecto Mayhem.
- La primera norma del Proyecto Mayhem es... - respondió el líder de los terroristas.
- ¡NO SE HACEN PREGUNTAS! - gritaron al unísono los mentes vacías.
- Pero, a ver, si podemos trazar un plan mucho más efectivo... ¡y sin necesidad de destruir nada! - Volvió a insistir el atrevido participante del Proyecto Mayhem.
- De acuerdo, te escucho - sorprendió a todo el mundo Tyler.
- Escuchar, en vez de volar por los aires todos estos edificios lo que haremos es lo siguiente: crearemos un grupo llamado "Proyecto Mayhem" en facebook para que la gente se pueda sumar a la causa. Entonces empezaremos a poner deberes en el muro cada semana: desmagnetizar videoclubs, ensuciar coches de lujo nuevos, reventar parachoques, destruir obras absurdas... la gente podrá comentar sus hazañas por Twitter e incluso colgar fotos en el grupo. Se crearán líderes de zona automáticamente y eso ayudará a dirigir sucursales de El Club de La Lucha: en Los Ángeles, Chicago, Nueva York... Creceremos gracias al boca oreja y la gente querrá formar parte del proyecto e inventará sus propias historias sobre Tyler Durden. Entonces llegará un día en el que seremos tantos que podremos dar el golpe para el Colapso Financiero. Los integrantes que estarán infiltrados como trabajadores en las grandes compañías mundiales, colgarán vídeos que demuestren la falsedad de sus corporaciones: cocinas del McDonalds con cucarachas cocinadas, explotación de Nike a niños desnutridos de 6 años, Materias Primas de Starbucks que podrían contaminar el amazonas entero... Vídeos de verdad cruda y malsonante. La gente no podrá apartar su mirada. Las Bolsas empezarán a caer y entonces... entonces el Proyecto Mayhem se reivindicará ante todo el mundo. - discurrió el chico.
- Tío, como jefe del proyecto Mayhem debo decirte que me parece una idea de puta madre. Es una pena que estemos en el año 1999.

* Imprescindible (tanto para entender el artículo como el siglo XXI) ver El Club de la Lucha.

Si Wilde hubiese tenido un Twitter

Twitter es un reto literario. Como lo han sido los grandes saltos a los distintos formatos durante toda la historia. Y ahora solo tenemos 140 palabras. Más que suficiente para mostrar los destellos del alma. Todos deberíamos ser escritores (entendido como una manera sana de expresar las emociones más escondidas mediante la escritura), seríamos más felices.
De esta manera, Twitter puede no ser solo un medio de comunicación comercial, curioso y vanidoso, sino que también puede mejorar nuestro espíritu. O nuestros espíritus en conjunto, porque permanecerá ahí, en el aire 2.0. Tal como lo hacen la sabiduría oriental o las frases de Wilde. ¿Cuanta información valiosa recaudaríamos si todas las personas del mundo escribieran una frase al día sobre su existencia en Twitter? Multiplicaríamos por infinito la que llevamos acumulada en más de 2.000 años de cultura.


Poséeme. Poséeme con todo tu ser, hasta que ya no quede nada de lo que era. Entonces volveré a ser yo mismo.


Perfecto, ya me siento mucho mejor.